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Acceso Inmigración está ABIERTO.

Debido a la propagación continua de COVID-19, todas las reuniones se realizarán por 

teléfono o video conferencia hasta nuevo aviso.

Resultados

La Sra. N ingresó a los Estados Unidos con una visa hace más de 20 años y se quedó más tiempo del permitido. Cuando su hija, ciudadana estadounidense, cumpliera 21 años, podría patrocinar a su madre para la residencia permanente. La abogada Katharine Rosenthal evaluó completamente los antecedentes penales y de inmigración de la Sra. N para confirmar que era elegible para la residencia permanente. Presentamos la solicitud y fue aprobada sin entrevista en cuestión de meses. La Sra. N ahora es residente permanente.

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La Sra. G y su esposo, ciudadano estadounidense, trabajaron con otro abogado para presentar su solicitud para que la Sra. G se convirtiera en residente permanente de los EE. UU. Ese abogado no presentó pruebas suficientes del matrimonio de buena fe de la pareja y no los preparó adecuadamente para su entrevista ante el Servicio de Ciudadanía e Inmigración de Estados Unidos (USCIS). Como resultado, USCIS inició una investigación de fraude. La abogada Katharine Rosenthal ayudó a la Sra. G y a su esposo a recopilar y presentar pruebas adicionales considerables de su matrimonio de buena fe y ayudó a la pareja a comunicarse con la agencia para solicitar actualizaciones y presionarlos para tomar una decisión. Fueron necesarios varios meses para que USCIS aprobara el caso, pero la Sra. G ahora es residente permanente de Estados Unidos.

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La Sra. S y su esposo solicitaron el estatus de no inmigrante U a través de una organización sin fines de lucro. La abogada Katharine Rosenthal les ayudó a modificar su solicitud cuando sus circunstancias cambiaron. Años más tarde, el Servicio de Ciudadanía e Inmigración de Estados Unidos solicitó información adicional, pero debido a un error de la agencia, ninguno de nosotros recibió el aviso y las solicitudes fueron denegadas. Ayudamos a la pareja a reabrir sus casos y presentar las pruebas requeridas. Sus solicitudes fueron aprobadas y ahora tanto la Sra. S como su esposo son residentes permanentes de Estados Unidos.

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La Sra. D estaba en los Estados Unidos con una visa J cuando conoció a su esposo. La abogada Katharine Rosenthal la ayudó a obtener el acuerdo de su país de origen para renunciar a su requisito de residencia de dos años para poder regresar antes a los Estados Unidos para estar con su esposo.

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El Sr. O solicitó la residencia permanente en los Estados Unidos a través de su hija, ciudadana estadounidense. Nos contrató para ayudarlo a responder a un aviso de intención de denegar su solicitud por falta de buen carácter moral. Preparamos una respuesta detallada, que incluía argumentos legales y pruebas sustanciales de su buen carácter moral. El Servicio de Ciudadanía e Inmigración de Estados Unidos aprobó rápidamente su solicitud. El Sr. O es ahora residente permanente de Estados Unidos.

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El Sr. G solicitó originalmente la naturalización en 2018 a través de otro abogado. Esa solicitud fue denegada debido a una percepción de falta de buen carácter moral. Entre 2018 y 2023, el Sr. G participó en actividades caritativas que le exigían estar fuera de los Estados Unidos durante largos periodos de tiempo. La abogada Katharine Rosenthal lo ayudó a obtener el permiso adecuado con anticipación para estas salidas para que no perdiera su estatus de residente permanente. También lo ayudó a planificar sus viajes para que tuviera suficientes días dentro de los Estados Unidos para solicitar la naturalización tan pronto como volviera a ser elegible. La estrategia tuvo éxito y el Sr. G ahora es ciudadano estadounidense.

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La Sra. F conoció a su cónyuge, ciudadano estadounidense, a través de un conocido mutuo y comenzaron una relación romántica a larga distancia. La abogada Katharine Rosenthal ayudó a la pareja a obtener visas de prometida para que la Sra. F y su hija ingresaran a los Estados Unidos. Después de su matrimonio, ayudamos a la pareja con las solicitudes para la residencia permanente de los Estados Unidos. Dos años más tarde, les ayudamos a obtener tarjetas de residencia por 10 años. Tanto la Sra. F como su hija han pasado por cada paso del proceso de solicitud con todo nuestro apoyo y esperamos poder ayudar algún día con sus solicitudes de naturalización.

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